13/1/10

BELLEZA DIVINA


¿Qué nos dices de Dios y quién es Él, en realidad?
Y el profeta se puso en pie frente a ellos como un árbol joven, sin miedo a los vientos y a la tempestad, y contestó:
Piensen ahora en un corazón que contiene todos los corazones.
Un amor que abarca todos los amores.
Un espíritu que envuelve todos los espíritus.
Una voz que cubre todas las voces.
Un silencio más profundo que todos los silencios, e intemporal.
Traten ahora de percibir en lo más profundo del yo
una belleza más encantadora que todas las cosas bellas,
un canto más vasto que los cantos del mar y del bosque,
una majestad sentada en un trono junto al cual Orión no es más que un estrado y que sostiene un cetro en el que las Pléyades no son sino el resplandor de unas gotas de rocío.

-Jalil Gibrán, El Jardín del Profeta.

Excelsa Belleza. De tu Amor infinito brotó esta creación. Indescriptible fuerza que impulsó desde el giro de los astros hasta la vida de la célula.
Oh, Belleza Increada. Siempre rebasarás nuestra inteligencia.
Y de tu amor nos dotaste de una conciencia privilegiada que pudiera interrogar, entender, amar y alabar.
Y luego, de tu amor, enviaste a tu Hijo mismo, para que nos hablara de las excelencias de tu Inmaculada Perfección.
¡Qué más amor puede siquiera concebirse!

Oh, Belleza. Desplegaste esta maravillosa naturaleza, inspirada en tan divina armonía y mantenida con tan gran cuidado para todos.
Te amo, Bondadosa Belleza, con toda la alegría que puede caber en mi corazón.
Tu excelsa Generosidad ha desplegado esta increíble creación.
No existen palabras para reconocer y agradecer suficientemente la magnificencia de tu capacidad creadora.
Aves melodiosas, bellas y coloridas flores, maravillosos insectos, cascadas de cristalinas aguas, plantas tan variadas.
Y además de todo esto, poner en nuestros corazones esta sed de alcanzarte, Hermosura Divina.

Grandeza de dulzura plena
Belleza de fuerza rebosante.
Presencia que habitas amorosa
en la esencia de los hombres.